HIMEN

El himen es una membrana delgada y frágil de tejido incompleto que rodea o cubre parcialmente la apertura vaginal externa. Forma parte de la vulva, o genitales exteriores, y es similar en estructura a la vagina.

Los efectos de las relaciones sexuales y el parto en el himen son variados. Si el himen es lo suficientemente elástico, puede volver a casi su condición original. En otros casos, puede haber restos (carunculae myrtiformes), o puede desaparecer completamente tras relaciones sexuales seguidas. Adicionalmente, el himen puede ser lacerado por enfermedad, lesión, examen médico, masturbación o ejercicio físico.

Formación del himen

Al principio, durante el desarrollo fetal, no hay una apertura vaginal. La delgada capa que cubre la vagina se abre parcialmente antes del nacimiento. El tamaño y forma varía mucho de una mujer a otra. Al nacer, la mayoría de los bebés de sexo femenino tienen himen, ya que el tejido se divide completamente estando aún en la matriz. Esta mayoría de niñas nacen con un himen no perforado (himen septado).

El obstetra suele examinar las condiciones de la vulva de la recién nacida para confirmar que su himen se encuentra en perfecto estado. Si la niña nace con el himen cerrado y éste permanece así hasta la primera menstruación (algo no muy común), es posible que la menstruación no fluya libremente fuera del cuerpo, lo que puede resultar doloroso y tener complicaciones que requieran de una intervención quirúrgica.

Antes de la pubertad, los tejidos de la vulva son generalmente muy frágiles y delgados. Cualquier actividad que someta estos tejidos a una gran tensión puede estirar y por tanto lastimar el himen. Así, se da el caso de que muchas jóvenes dañan o dilatan su himen al efectuar actividades físicas como deportes, montar a caballo, insertar o quitar tampones o al masturbarse. Una muchacha puede no ser consciente de que esto ocurre, sobre todo si no hay sangre o dolor durante el evento.

En algunas mujeres el himen se rompe en más de una ocasión. Incluso algunos son lo suficientemente elásticos para permitir que la vagina sea penetrada sin que el himen se desgaste. Esto suele ocurrir si la dilatación vaginal se produce gradualmente con los dedos o con otros objetos durante un período extenso de tiempo. Se han dado casos de mujeres embarazadas que llegan a la sala del parto con el himen intacto, por lo que el médico tiene que rasgarlo para facilitar el nacimiento del bebé.

Histología

El himen está constituido por un esqueleto conjuntivo-fibroelástico, ricamente vascularizado e inervado, que se encuentra recubierto por mucosa. Esta capa fibroelástica varía extraordinariamente en cuanto a su desarrollo y es la responsable de la consistencia y elasticidad del mismo.

Tipos de himen

Hímenes normales o típicos

 
Diferentes tipos de himen (las áreas oscuras representan la abertura vaginal).

Son aquellos en los cuales el orificio está en el centro, hacia arriba o en la línea media. Así, se reconocen tres tipos de hímenes típicos: anular, semilunar y labiado. El himen más frecuente entre los examen médico legales ginecológicos es el dilatable.

  • Anular. Presenta un orificio central, rodeado por membrana con un ancho más o menos igual. Sus puntos débiles están en 2, 5, 7 y 10 de la carátula de reloj.
  • Semilunar. Tiene el orificio desplazado hacia la porción superior, de modo que por debajo queda una medialuna de membrana. Sus puntos débiles están en 4 y 8.
  • Labial o labiado. Tiene un orificio alargado en la línea media, de dirección sagital, con membrana a uno y otro lado, a la manera de labios. Puede romperse en los puntos 6 y 12.
  • Franjeado o de herradura
  • Estrelado
  • Tag himeneal. Se trata de una variante de la normalidad que consiste en la presencia de tejido himeneal o excrecencias mucosas que se ven más frecuentemente en las recién nacidas y que suelen desaparecer posteriormente al cambiar las condiciones hormonales condicionadas por la madre durante la gestación.

Hímenes anómalos o atípicos

Comprenden múltiples variedades que escapan al tipo de descripción sencilla de los hímenes típicos. Entre los más frecuentes se encuentran.

  • Biperforado, septado o tabicado (con dos perforaciones). Cuenta con un tabique horizontal o vertical que divide el orificio en dos.
  • Herradura obturada.
  • Hipertrofiado (muy grande).
  • Imperforado (sin perforaciones). Carece de orificio y requiere intervención quirúrgica para la salida de la sangre menstrual. El himen imperforado es una rara malformación congénita que ocurre en el 0,1% de los recién nacidos del sexo femenino.
  • Trifoliado (de tres pliegues).
  • Multifoliado (de varios pliegues).
  • Coroliforme (parecido a la corola de una flor). Presenta prolongaciones a la manera de pétalos que se disponen unos sobre otros.

Himen flexible

El himen flexible o dilatable, también conocido como himen complaciente, presenta un orificio que permite el paso del pene o de dedos (en el caso de la masturbación) sin romperse y vuelve a las dimensiones normales una vez que aquél o aquellos se retiran. La presencia de una mayor cantidad de fibras elásticas en su composición, le aporta una gran flexibilidad. Fisiológicamente esta condición hace que durante las primeras y sucesivas relaciones sexuales, el orificio himeneal se dilate lo suficiente como para poder admitir la penetración peniana con facilidad, sin producir lesión himeneal y por lo tanto, conservar así, sus características de integridad.

Himen orificio dilatado

El himen con orificio dilatado tiene también la membrana íntegra, pero en cambio, el orificio mantiene un diámetro anormalmente grande. Esta condición puede ser congénita o adquirida por dilataciones lentas, repetidas y progresivas.

Artificial

El himen artificial hoy se comercializa alrededor del mundo. Este producto consiste de una membrana gelatinosa que desprende un líquido rojo formado por albúmina, se coloca veinte minutos antes de la relación sexual, fingiendo así una ruptura del himen y garantizando al compañero la virginidad de su amada.

Uno de sus principales mercados fue China a través de internet, pero fue prohibido por autoridades del país tras ser considerado peligroso debido a sus componentes. Debido a su naturaleza, en algunos países islámicos vender el producto se paga con la pena de muerte.