DIATERMIA CONDUCTIVA CAPACITIVA

DE ÚLTIMA GENERACIÓN

PRIMERO CONDUCTIVA

Si se disponen dos electrodos metálicos en contacto directo con la piel, de modo que la zona a tratar quede comprendida entre ambos y aplicamos a ellos una corriente de alta frecuencia (HF), ésta atravesará los tejidos que encuentre a su paso por conducción eléctrica y producirá en ellos un aumento de temperatira de acuerdo con la ley de Joule. (Todo conductor se calienta cuando pasa una corriente eléctrica a través suyo).

De aquí se deduce que a igual intensidad y tiempo de aplicación, el calor generado dependerá directamente de la resistencia eléctrica del tejido atravesado, de modo que a mayor resistencia, mayor producción de calor. La diatermia conductiva, por tanto, aumentará más la temperatura de la piel y grasa (malos conductores), y menos en músculos y visceras (buenos conductores).

LUEGO CAPACITIVA

Los investigadores de las últimas décadas han permitido plantearse recientemente que las corrientes de alta frecuencia, diseñadas con fines terapéuticos, pueden ser aplicadas de forma más racional, eficaz, sin riesgos, así como aprovecharse de otras formas de acción benéficas (no solamente derivadas del aumento de temperatura) que poseen estas corrientes cuando se generan y aplican con una lógica bien estudiada.

TÉCNICA ACTUAL: DIATERMIA CONDUCTIVA CAPACITIVA DE ÚLTIMA GENERACIÓN

La corriente de (alta frecuencia), procedente del aparato, llega al radiador metálico del electrodo de aplicación, el cual se comporta como una de las láminas de un condensador, y se transmite al organismo de forma capacitiva, ya que el policarbonato que se interpone actúa como dieléctrico. La otra lámina de este condensador es el propio organismo.

VENTAJAS DE LA TÉCNICA ACTUAL

 Acción por igual tanto en tejidos con gran presencia de moléculas dipolares: sangre, linfa, músculo, (forma capacitiva); como en zonas con mayor resistencia al paso de la corriente eléctrica: tejido adiposo, hueso, cartílago (efecto Joule por conducción).

Al tratar con electrodos en contacto físico con la piel, nos permitimos tranferir ondas de longitud mayor (hectométricas en lugar de métricas), con las que se producen mejores resonancias y efectos piezo eléctrico a nivel celular, evitando el riesgo que conllevan las ondas cortas.

No se produce refracción de las ondas, por lo que el terapeuta queda salvaguardado de radiación espúrea. Acción en profundidad, empleando potencia baja, al existir una transferencia total de la energía.